Vistas de página en total

martes, 7 de febrero de 2017

Hey Satan : fuerte rock suizo a sangre fría

Buscando entre las portadas de las nuevas propuestas sonoras del 2017 el encuentro con un torso de una mujer desnuda sobre un fondo negro, irremediablemente la atención cae en la hipnótica ilustración. Los cálidos colores de dibujo hacen arder la mirada mientras en el vértice contrario de la tapa un ojo panóptico logra crear un equilibrio estético, mágico símbolo que con su luz ilumina el nombre de la nueva sensación hard rock que ha llegado desde el país helvético: Hey Satan.

Una vez hechizados con la portada hecha por Amélie Avril y Michaël Jousson, nos adentramos en la propuesta musical de esta banda originaria de la olímpica Lausana, pequeña ciudad suiza asentada a orillas del lago Lemán. Tras unos cuantos segundos de haber apretado el botón de play, una energética batería y un ejército de guitarras distorsionadas nos ofrecen una idea de lo que podremos escuchar durante los diez temas que conforman este álbum debut publicado a finales de enero de 2017 a través de la local disquera Cold Smoke Records.


Dejando en un rincón olvidado al bajo eléctrico, Hey Satan se formó en 2014 con la intención de unirse al exclusivo club de bandas que con tan sólo el poder de los amplificadores y los pedales de distorsión construyen poderosos muros sonoros imposibles de atravesar. Con un sonido cercano a grupos ya reconocidos como Black Rebel Motorcycle Club, Royal Blood o The Blackwater Fever, este trío suizo nos ofrece una mezcla entre rock y metal alternativo al estilo de Dozer o Audioslave y el stoner de la costa este norteamericana de gente como Clutch y Monster Magnet.

Las guitarras de François y Laurent se combinan hasta crear un sonido compacto y directo que puede matar y resucitar con un solo golpe. La batería de Frank nos sacude salvajemente a cada tiempo marcado mientras la voz de Bob Morlock (sobrenombre de François) se desgarra por los altavoces hasta deshacerse junto con el ruido general. En pocas palabras, ésta es la sencilla pero adictiva fórmula de Hey Satan: el certero impacto en los tambores, los acordes diferenciados por tonos en cada bocina y las crudas cuerdas vocales explotando sin control.


Grabado, mezclado y masterizado por Serge Morratel durante el mes de junio de 2016 en el Rec Studio de Ginebra, el álbum debut de Hey Satan es una colección de dardos directos a las neuronas que buscan sacudir el alma, cápsulas que entran al cuerpo como tormenta eléctrica, poderosa carrera que acelera la sangre en las venas y agita las células. Una vez arrastrados por el vendaval sonoro, miramos a nuestro alrededor para encontrar nuestros restos en el suelo aún vibrante.

Uno de los temas que nos llamaron la atención desde el pre-lanzamiento del disco en noviembre de 2016 en la página de Bandacamp del grupo fue "In cold blood", un misil lanzado de manera directa a su objetivo gracias al poder de su riff inicial de figura en caída libre. Percusiones vibrantes de tiempos muy lejanos y tonos graves producidos por los efectos electrónicos sobre las seis delgadas cuerdas. Un pie pisa el pedal de wah y el gemir de la guitarra se transforma en un lamento cósmico, pero lejos de quedar abandonado, el resto de los instrumentos golpean con mayor rabia hasta hacer crecer el tema como si fuera una enorme ola que busca ahogar todo a su paso.


Desde el canal de YouTube del vocalista de la banda podemos observar un collage de sangrientos extractos de películas viejas a blanco y negro mezclados con místicos rituales satánicos a technicolor mientras la banda explota las bocinas con la fuerza de "In cold blood". Sencillo montaje visual que acompaña a la perfección el poder del tema y que permite acercarnos al concepto sonoro de Hey Satan, mismo del que es fácilmente quedar prendido.


Esta ha sido la primera prueba al primer disco del trío suizo, mismo que esperamos que empiece a hacer sonar sobre los escenarios y logremos así saber cómo se escucha en vivo. A la distancia desde este lado del Atlántico, nos conformarnos con dar un click para permitir que los datos electrónicos saturen nuestros tímpanos mientras Hey Satan comienza a establecerse como una de las mejores propuestas del país helvético y se ganan al público europeo...


No hay comentarios:

Publicar un comentario